Desde hace ya algún tiempo venimos hablando de actitudes y ejemplos de actividad social empresarial. Existen muchas iniciativas tanto de ámbito nacional como internacional en este sentido. Gehitu ha desarrollado varias intervenciones en esta dirección durante este verano y, por eso nos sentimos muy orgullosos de contarlo en las páginas de nuestra revista.

Sin duda la implicación de las empresas en la responsabilidad social es una meta ambiciosa, y es un estupendo medio para la normalización y visibilización del colectivo LGTBI. Por eso desde Gehitu hemos querido apostar por la implicación “personal” de las empresas del ámbito privado en algunas de nuestras campañas.
En el entorno geográfico en el que desarrollamos nuestra actividad, la Comunidad Autónoma del País Vasco, más del 90% de las empresas son Pymes (pequeñas y medianas empresas), por lo que su importancia y cercanía a la sociedad son, a nuestro juicio, importantes. Estamos convencidos de que, en la mayor parte de los casos, es tanto o más importante el apoyo o soporte de una firma o marca en una campaña que los gestos económicos. Y por ello una de nuestras metas, y sin duda parte del camino que todavía queda por recorrer hacia la normalización, pasan por la implicación del entramado empresarial.
El ejemplo que queremos mostrar se corresponde con la campaña de prevención del VIH que Gehitu pone en marcha todos los veranos dentro de la cual se hace una distribución de preservativos y lubricantes acompañada de la pegada de carteles. Todo ello para promover  su uso e informar sobre el PPE (Profilaxis Post Exposición). Han sido varios los apoyos recibidos hacia esta campaña y por eso no queremos dejar pasar la oportunidad de comentarlos y darles el valor que se merecen.

En primer lugar destacar la colaboración y apoyo ofrecido por Euskal Trenbide Sarea/Red Ferroviaria Vasca (ETS), ente público que impulsa el transporte ferroviario, que ha facilitado la distribución de la cartelería correspondiente a dicha campaña en las líneas de ferrocarril gestionadas por el operador Euskotren.
Especialmente valiosa también ha sido la contribución dada por Teledonosti, empresa gestora de la publicidad en las pantallas interiores de los autobuses que unen Bilbao y Donosti-San Sebastian, ofreciendo soporte publicitario para la campaña durante los días de mayor movimiento de personas por celebrarse las fiestas de las dos capitales vascas.

Agradecemos, también, muy especialmente la disposición, atención e interés mostrado por la organización del Festival de Blues de Hondarribia. Evento al que sin dudarlo os invitamos a acudir el próximo año en el mes de Julio http://www.blueshondarribia.com. La organización del Festival no sólo nos facilitó la labor de difusión de la campaña sino que se volcó en la misma y colaboró activamente en el reparto de material preventivo en el recinto del festival.

Otra colaboración especialmente valiosa, y que ha demostrado ser de especial utilidad para un mayor alcance en la campaña, ha sido la ofrecida por la empresa INDARLAN ubicada en el municipio de Mungía, en Vizcaya. Queremos agradecer tanto a su dirección como a sus trabajadores las facilidades ofrecidas, su amabilidad y promoción desinteresada de la campaña. INDARLAN es una empresa dedicada al alquiler de medios higiénicos y baños portátiles para su uso en eventos colectivos y fiestas locales, a muchas de las cuales hemos acudido. Nos ha permitido utilizar     sus instalaciones en Mungia para colocar la publicidad de la campaña en sus baños. De este modo salieran a sus destinos con la información ya colocada y bien visible. Además en este caso, la empresa orgullosa y consciente de la utilidad de la acción ha dado a conocer su colaboración a sus clientes como un valor añadido del servicio que prestaban. Entendiendo su distribución como una mejora de su propio servicio.

Queremos dar igualmente las gracias a todas las personas responsables de bares, hosteleras y responsables de txosnas (espacios de distribución de bebida y comida en las fiestas locales vascas) que, durante estos meses y a petición de los encargados de la campaña, han tenido a bien recoger y distribuir el material entregado,así como apoyar la labor de Gehitu, mostrando su interés y su preocupación por los objetivos de la misma.
Sirva todo esto para mostrar y hacer públicas, no sólo las posibilidades de la implicación de las empresas sino la necesidad de contar con su apoyo desde el mundo asociativo.

Una asociación como la nuestra depende, en gran medida, de subvenciones públicas y de las aportaciones de sus personas socias, siendo éste un binomio que,en muchas ocasiones, tiende al desequilibrio y que en otras puede ser difícil de gestionar. Pero hay una cuestión común y necesaria: la voluntad. La voluntad de quienes lideran política y técnicamente las instituciones, la de las socias y socios, el personal colaborador, voluntario o trabajador y, por último,la de las empresas para asumir una responsabilidad social más allá del beneficio económico.Cada uno de estos actores mencionados puede implicarse más o menos en una acción, puede identificarse o ser más sensible hacia unas cuestiones u otras, o incluso formar parte de esas misiones, visiones y valores que pudieran recordar al modelo EFQM de excelencia y gestión.

Trascendiendo las declaraciones de intenciones es necesaria esa voluntad que se manifiesta con pequeñas oportunidades de colaboración o de simple distribución, de mostrar y principalmente de facilitar que las acciones emprendidas por terceras personas o entidades, con un claro y evidente beneficio social, lleguen a término. No muchas veces requieren hacer o dar.

Quizás suene a quien lea estas líneas la idea de que el fin de la economía es el bien común (especialmente si sabe quién es Christian Felber), o, simplemente considere que el dinero es un medio y no un fin.Todos los casos citados anteriores son simples ejemplos de estas ideas y de lo fácil que puede ser el camino, porque de la misma forma que se nos dan facilidades, con más frecuencia nos encontramos con trabas y caminos sin salida.

En Gehitu creemos que el beneficio social es un fin del conjunto del entramado social, por eso la implicación de cada vez más entes y estamentos es cada vez más necesaria. Las leyes poco a poco van cambiando en nuestro entorno (no olvidemos el gran privilegio que tenemos, y del que otros no disfrutan), por eso es ahora la sociedad la que debe interiorizar y hacer suyas las necesidades del colectivo LGTBI. Y dentro de la sociedad el tejido empresarial a través de su responsabilidad social.

Carlos Velasco Aznar